Cuando vendemos nuestra espiritualidad

Nosotros nos dejamos comprar nuestra espíritualidad, cuando el mensaje que nosotros entregamos, se transforma en un mensaje sesgado que para agradar a los que escuchan el mensaje y no entregamos lo que realmente Dios quiere entregar a ese pueblo vamos prostituyendo el mensaje de Dios para que la gente nos alabe.
Un ejemplo clasico y usado en muchas predicaciones es el de Baalam, el hijo de Boor, quien era profeta de Dios vendio su profecia a cambio de dinero .
Asi también nosotros nos vendemos quizas por la alabanza de la gente, también por llamar la atencion sobre nosotros mismos y no sobre el dueño del mensaje, que nos encomendó Dios.
Este burro somos nosotros mismos que no comprende que este razonamiento de Dios cuyo objetivo es promover que nuestra conciencia está marcada por el llamado de Dios, pero aun en la Biblia los burros parecen comprender el mensaje de Dios y comprenden la espiritualidad mejor que nosotros.